¿Alguna vez compraste o brindaste un servicio a través de internet? Entonces, sin querer, estuviste realizando una actividad de comercio electrónico. Y es que, en pocas palabras, el comercio electrónico o e-commerce es la manera en la que los usuarios compran, venden y acceden a millones de servicios y productos.
Teniendo sus orígenes en las ventas a través del teléfono, hoy por hoy, el comercio electrónico es una actividad realizada alrededor de todo el mundo. Te preguntaste, de casualidad, ¿cuál es su importancia? A continuación, se explicará más al respecto.
Introducción
A lo largo del mundo, el comercio electrónico está creciendo a grandes pasos. Por supuesto, América Latina es un ejemplo de ello.
Tan solo a cerrar el 2019, la expansión de las ventas a través de canales digitales llegó a aumentar en un 15.7% en la región, con respecto a las cifras del 2018, de acuerdo con las estadísticas del Índice Mundial de Comercio Electrónico.
Ello se debe al crecimiento del marketing digital, que se da mediante internet y el uso de las redes sociales. Y es que, por ejemplo, en la región existen más de 300 millones de usuarios en Facebook.
Ante ello, es de suma importancia que cada empresa realmente logre la transformación digital para sacar el máximo provecho.
Por esa razón, en las siguientes líneas queremos brindarte la información necesaria sobre el e-commerce, tales como su definición, características y demás.
¿Qué se entiende por comercio electrónico?
El comercio electrónico, también conocido como e-commerce, tiene como principal característica la actividad económica que busca el comercio de compra y venta de productos y servicios a partir de medios digitales.
Por ejemplo, las páginas web, aplicaciones móviles y redes sociales.
Es a través de internet que los clientes pueden acceder a diversas marcas, productos y servicios en cualquier momento y lugar.
Así pues, los establecimientos ya cuentan con páginas web y crean perfiles en redes sociales para conseguir alcanzar un público objetivo.
Por tanto, vender y comprar ya es una tarea sencilla. Básicamente, se trata de los procesos de venta y compra de productos y servicios a través de canales electrónicos, especialmente webs de internet, aplicaciones y redes sociales.
Visto de otro punto de vista, también se puede explicar y valorar como un proceso en el que dos o más personas llegan a un acuerdo comercial (específicamente de compra o venta) a través de vías digitales o electrónicas.
Esta última definición deja en claro que para comercializar de manera electrónica no es necesario crear una gran tienda virtual y ser una marca consolidada en internet, pues cualquier persona puede hacerlo a través de una simple publicación en sus redes sociales o aprovechando una plataforma externa.
Evidentemente, cuando se quiere hacer de esta actividad un negocio rentable, sustentable y duradero, es importante centrarse en campos como el branding, autoridad digital, mercadotecnia y muchos otros elementos que contribuyen con el posicionamiento y la exposición.
¿En qué consiste el comercio electrónico?
Por lo general, existen diversos tipos de comercio electrónico. Sin embargo, en su mayoría, todos cuentan con:
a. Plataforma digital
Es el elemento fundamental para llevar a cabo un comercio en el mundo digital.
Estos medios son las plataformas que sirven a los usuarios para acceder a los productos y servicios que ofreces, conocer sus características, ponerse en contacto contigo, y concretar la compra.
Por tanto, las plataformas digitales pueden ser sitios web, blogs, aplicaciones móviles o incluso perfiles de redes sociales, ya sea que plataformas más visuales como Instagram o que requieren de mayor trabajo como Facebook o Twitter.
b. Interfaz de interacción
Tener una buena interfaz es esencial si quieres retener al público dentro de tu plataforma de ventas.
Ten presente que, en muchos casos, los compradores quieren llevar a cabo las compras de una forma rápida, por lo que una plataforma amigable y sencilla de usar puede optimizar la experiencia del consumidor.
Por ello, los sitios web deben tener un buen diseño y las aplicaciones móviles deben ser intuitivas.
En todo caso, deberás incluir información completa de aquello que vendes y promover un acceso fluido.
c. Sistema de pago
Sin duda, el sistema de pago es uno de los elementos más importantes para todo negocio en línea, dado que representa el punto final de la compra electrónica.
Debemos implementar una pasarela de pagos robusta y segura para generar confianza en la compra.
Recuerda que los consumidores esperan realizar el pago de lo adquirido, de una manera fácil, simple y rápida.
Entre los métodos más populares se encuentra:
- Pago con tarjeta de crédito
- Pago con tarjeta de débito
- Transferencia bancaria
- Pago a través de intermediarios
Aún así, ten en cuenta que muchos usuarios prefieren usar medios tradicionales de pago o quieren tener la certeza de la llegada de sus productos.
Para responder a estos públicos, pueden ofrecer la modalidad de pago contra entrega con pagos en efectivo.
d. Políticas de privacidad, términos y condiciones
En muchas ocasiones, este paso es omitido.
En las plataformas de redes sociales, presentar la información de tus políticas de privacidad y los términos y condiciones, son parte de una operación esencial para brindar una buena atención a tus clientes.
Así pues, estos dos elementos dan la información necesaria para que los consumidores sepan las implicaciones que tienen sus compras, cómo se guardan sus datos y qué se debe considerar al comprar algo de tu negocio.
Recuerda que debes incluir:
- Uso de los datos privados
- Políticas y costos de envío
- Sistema de reclamaciones
- Información de garantías
- Canales de comunicación
e. Sección que incluya preguntas frecuentes
Tener un sitio electrónico facilita las tareas y optimiza los procesos de venta. Ello se debe a que no se requiere de tener gestores comerciales atendiendo constantemente a los usuarios.
Aún así, muchas veces los consumidores tienen dudas sobre un servicio o un producto, ya sea acerca de los métodos de pago o respecto a la modalidad de envío.
Por tanto, para dar certeza al cliente, y así evitar la constante comunicación con tu negocio, opta por incluir una sección de preguntas frecuentes (o FAQ por sus siglas en inglés).
Este elemento te ayudará en la gestión de ventas y es un gran aliado para simplificar los procesos.
¿Por qué es importante el comercio electrónico?
Hasta este momento se ha podido brindar algunas ventajas del e-commerce, tales como su alcance mundial, facilidad para el comprador, y demás.
Sin embargo, existen muchas más ventajas específicas de este método de comercialización.
A continuación, te explicamos 3 de ellas.
1. Flexibilidad y simplificación
Tener una tienda virtual que sea exitosa, no se necesitará de cientos de empleados, siempre y cuando cuentes con una buena arquitectura y soporte tecnológico.
Además, existen soluciones novedosas como dropshipping, que simplifican de manera significativa el proceso de ventas online.
Específicamente, este modelo permite que los comercios electrónicos operen sin contar con un stock, pues brinda un enlace directo con el proveedor del producto.
2. Acceso a la información
Aunque no se crea, el marketing digital y con ello el inbound marketing también influye, sobre todo cuando se comercializa de una forma electrónica.
Ello se debe a que la dinámica del e-commerce brinda acceso a información valiosa sobre la identificación de los clientes, sus patrones de consumo y las preferencias del mercado.
Además, resulta muy sencillo de manejar, siguiendo las diferentes métricas y KPIs del e-commerce, entre ellas: la tasa de conversión, tasa de clic, etc.
3. Una menor inversión
En los últimos años, el comercio electrónico no solo se ha convertido en una gran fuente rentable para grandes marcas; sino que también se ha consolidado como una muy buena alternativa para los pequeños y medianos emprendedores.
Ello se debe a que demanda inversiones mucho menos elevadas que un comercio tradicional. Entre otras cosas, esto permite ahorrar costes en cuanto a empleados, inventarios de gran volumen y gastos asociados con el mantenimiento y el alquiler de tiendas físicas.
¿Para qué sirve?
A continuación, específicamente, te hablaremos acerca de las 3 cosas para las que sirve el e-commerce.
1. Asegura un incremento de las oportunidades de venta
Evidentemente, un comercio que opera de forma tradicional incrementará de forma significativa sus oportunidades de venta si también decide aprovechar los canales tecnológicos.
Por otro lado, las marcas que se dedican exclusivamente a esta forma de comercio también cuentan con mayores oportunidades, dado que tienen acceso a una comunidad más amplia de millones de usuarios.
2. Puedes brindar productos innovadores
En el mercado tradicional, el lanzamiento de productos innovadores implica una gran inversión en publicidad y un gran esfuerzo para llevarlo a diferentes puntos de venta o proveedores adecuados, así como la productividad de un equipo de publicidad o venta.
Por eso, muchos medianos y pequeños emprendedores aprovechan el comercio electrónico para ofrecer servicios o artículos novedosos, permitiendo a los usuarios conocer sus especificaciones e, incluso, interactuar con algunas de sus funciones antes de comprarlo.
3. Un reconocimiento de marca
En caso de que tu negocio tenga años de trayectoria, pero su reconocimiento de marca es muy bajo, sin duda necesitas de la ayuda del comercio electrónico.
Comercializar en la gran comunidad de internet y las redes sociales, sirve para que una marca pase de ser “invisible” a ser conocida por millones de usuarios y actores del mercado.
Características del comercio electrónico
A pesar de que, al igual que el comercio tradicional, tiene como objetivo el de generar ventas, sin duda el comercio electrónico es muy distinto.
Existen muchas características que diferencian al e-commerce de lo que era el comercio. Estas son algunas de ellas:
Alcance global
Mucho tiempo atrás, para que una empresa pueda generar ventas en otro continente tenía que ser una organización gigante, con diferentes sucursales, colaboradores y una gran capacidad de logística.
Hoy por hoy, el comercio electrónico le brinda el alcance global a todo aquel que lo desee. Y es que, consumidores de cualquier país podrán ingresar a tu tienda virtual o cuenta de las redes sociales.
Para ello, simplemente debes desarrollar las estrategias adecuadas para conectarte con ellos.
Ubicuidad u Omnipresencia
¿Habías oído hablar de este término? Esto se refiere a aquello que tiene la capacidad de estar presente en todas partes al mismo tiempo.
Así es, tal y como lo hace el comercio electrónico. Si así lo desea, una tienda virtual puede atender al público las 24 horas del día, independientemente del lugar en que se encuentre el usuario.
Interactividad
Por último, otras de las características del comercio electrónico es que ofrece una retroalimentación constante entre los consumidores y las marcas.
En tan solo segundos, los usuarios pueden hacer preguntas, comentarios sobre productos e, incluso, plantear quejas.
Mientras, los negocios que se preocupen por la atención al consumidor tienen la posibilidad de responder a cualquier interacción de inmediato.
¿Cómo funciona el comercio electrónico?
El principal requisito para fortalecer relaciones comerciales digitales es contar con una plataforma en línea para llevar a cabo los procesos de venta y compra.
Por su naturaleza, el comercio electrónico requiere de un acceso a la red de internet y un medio de interacción entre el cliente y el vendedor.
En términos generales, un comprador tiene acceso al medio de ventas, selecciona el producto o servicios que desee, realiza el pago del bien y recibe aquello que compró, ya sea virtual o de forma física.
Aunque muchas de estas plataformas son cada vez más autónomas y simplificadas, muchas veces se necesita del acompañamiento de asesores.
Por ello, es importante no confundir el comercio electrónico con una falta de servicio de atención al cliente o de gestores de ventas.
Entonces, para crear un medio de este tipo, es necesario que digitalices tus bases de datos, inventarios y métodos de cobro.
Así, el comercio electrónico requiere de una completa presenta en formato digital y una constante actualización para evitar fallas en las compras o demás.
Resumen
Así pues, el comercio electrónico ha recorrido un largo camino desde 1994 hasta nuestros días.
Y es que todo ello, ha logrado que millones de usuarios alrededor del mundo se sientan más cómodos a la hora de comprar, vender o acceder a un servicio. Todo con la ayuda de internet.